Actualmente dicho padecimiento ha ido en aumento dado que los hábitos de alimentación cada vez van más orientados a un exceso en le consumo de grasa y calorías. Para esto es importante establecer un plan de alimentación individual que garantice una pérdida de peso sostenida que no ponga en riesgo la salud y que tome en cuenta padecimientos asociados y prevenga enfermedades crónicas como la diabetes, presión alta, colesterol elevado, entre otras.
Dificultad para eliminar las heces de manera continua o en volúmenes adecuados. Puede estar dada por trastornos de tipo orgánico o funcional. Para su tratamiento se requiere una dieta alta en fibra que mejore el movimiento del intestino y promueva una evacuación constante y poco dificultosa. Algunos de los efectos secundarios del estreñimiento es el conocido síndrome de colon irritable (colitis) por lo que la elección del tipo de fibra a consumir juega un papel importante, ya que si no se elije correctamente la inflación puede aumentar llevando a un dolor del colon más intenso. Es muy frecuente en personas poco activas, de edad avanzada o bien encamada.
Aumento anormal del colesterol sanguíneo, usualmente relacionado con un exceso en el consumo de grasas saturadas y de alimentos de origen animal. Aunque el factor hereditario es importante, la mayoría de los casos están asociados con la alimentación, por lo que es indispensable asegúrase que los alimentos fuentes de dicho nutriente sean suprimidos para que este regrese a los niveles esperados.
Falta de apetito voluntara ocasionada, en la mayoría de los casos, por un enorme temor al aumento de peso. Dicho padecimiento es usual en adolescentes. Sin embargo en los últimos años, debido a la presión social por mantener una buena figura, se han documentado casos en niños. Por el momento en que se encuentran tanto los niños como los adolescentes es muy peligroso un bajo consumo de nutrientes porque pone en riesgo su desarrollo y crecimiento. Uno de los síntomas más frecuentes es la distorsión de la imagen corporal, es decir que a pesar de que están muy delgados se ven sumamente “gordos”. El abordaje debe ser paulatino y se debe procurar un consumo de alimentos mínimo que garantice un buen estado de salud.
alteración en los niveles de azúcar en sangre. Es causada por varios trastornos, incluyendo la baja producción de la hormona insulina, secretada por el páncreas, o por su inadecuado uso por parte del cuerpo, esto repercutirá en el metabolismo de los carbohidratos, lípidos y proteínas. Los síntomas incluyen un aumento anormal de la necesidad de comer, incremento en la sed y por consecuencia un aumento en la excreción de orina.
Para su control es de suma importancia evitar todos los azúcares simples y mantener un régimen de alimentación ordenado de tal manera que se evite alteraciones por el consumo excesivo de alimentos fuente de carbohidratos, además es conveniente mantener un horario adecuado en las horas y la cantidad de alimentos consumido por tiempo de comida.
Deseo incontrolable de comer que suele caracterizarse por episodios de ingestión de alimentos excesivos seguidos de provocación de vómito o bien purgas para eliminar los alimentos consumidos. El tratamiento de esta enfermedad debe incluir no solo debe incluir el manejo de los “atracones “(consumo excesivo de alimentos en un periodo muy corto de tiempo) sino también todos los efectos colaterales producidos por la provocación del vómito o por los purgantes. Generalmente presentan alteración en estómago, esófago, garganta, entre otros.
Hipertrigliceridemia o triglicéridos elevados. Aumento anormal en los niveles de triglicéridos en sangre. Esta asociado con un exceso en el consumo de alimentos fuentes de carbohidratos y azúcares simples. El tratamiento requiere de la eliminación de los alimentos fuente de este nutriente así como de monitorear efectos secundarios como la Esteatosis Hepática (hígado graso).
Hipertensión: Trastorno que se caracteriza por un aumento en la tensión arterial. Para su tratamiento es necesaria la eliminación de alimentos fuentes de sodio, así como el manejo integral de sus efectos secundarios.
Aunque generalmente carece de una causa fácilmente identificable el riesgo de generarla aumenta con la obesidad, el colesterol elevado, padecimientos del corazón. Loa cuales están directamente asociados a un mal consumo de alimentos.
Eliminación frecuente y excesiva de las heces, debido a un aumento en el movimiento del intestino. Generalmente esta asociada a enfermedades como malabsorción intestinal, tumores gastrointestinales, síndrome de colon irritable e intolerancia o alergia a cientos alimentos. Para evitar esta molestia, es de suma importancia establecer un régimen de alimentación que garantice la recuperación de la funcionalidad del intestino así como todos los efectos secundarios asociados a diarreas recurrentes, entre los que podemos encontrar desnutrición por eliminación excesiva de algunos nutrientes o bien por mala absorción de los mismos, además deshidratación y perdida de sodio y potasio.